"El futuro del sector del vino en Aldeanueva de Ebro es elaborar y etiquetar nosotros, porque si no estás siempre dependiendo de otros"
"Tendremos que ir innovando para tratar de coger al resto de zonas de Rioja, aunque nos llevan mucha ventaja, porque al final nosotros hemos empezado a elaborar hace veinte años".
"Más allá de etiquetas de 'capital de...' lo importante es que cuando se abra una botella de Aldeanueva el vino esté bueno y se tengan ganas de repetir"
"Desde hace mucho tiempo vimos la necesidad, en la corporación municipal, de promocionar nuestro el viñedo, nuestros vinos y nuestras marcas"
— ¿Cómo se recibió el premio, les sorprendió el galardón?
— Para recibir el premio hay que postularse. Nosotros sabemos que hacemos muchas cosas y siempre tienes la sensación de que te pueden dar el galardón o no, pero cuando nos comunicó el consejero que éramos merecedores de él, fue una gran sensación. Son muchos años ya haciendo muchísimas cosas y es bueno que te lo agradezcan de esta forma. Al fin y al cabo en Aldeanueva de Ebro muchísima gente vive del mundo del vino; y para nosotros es primordial que la corporación municipal se esfuerce, invierta sus esfuerzos y dineros en promocionar y en que los vinos de Aldeanueva y los de La Rioja salgan a flote.
— Se sintieron, por tanto, profetas en su tierra...
— Fue una gran alegría, por fin, nos ha dado el Gobierno de La Rioja un premio, un agradecimiento, una consideración y reconocimiento de que se están haciendo bien las cosas, de que estamos trabajando en la línea adecuada: estamos promocionando el vino de Aldeanueva, el paisaje... De hecho casi todas las iniciativas que hacemos desde la corporación, en lo referido al mundo del vino, lo hacemos para el sector: para los viticultores, las bodegas, para incluso el enoturismo de alguna familia...
— Exactamente, ¿qué actividades hace o promueve el Ayuntamiento de Aldeanueva que le han hecho merecedor del premio de La Rioja Capital?
— Se llevan a cabo diferentes actividades: asesorar e ir a ferias con ellos, como por ejemplo Alimentaria, aunque este año se ha dejado de subvencionar la visita y es muy difícil poder llegar a participar; en invierno hacemos tardes de 'Música y vino' que tiene un éxito total, las entradas están agotadas quince días antes de que se celebre cualquier cosa, a la gente se le entretiene, se degustan tres vinos comentados, es desde enero hasta abril, cada quince días. Por supuesto, el Entreviñas: nos volcamos en la feria de dos días, sábado y domingo, y el viernes con profesionales y catas; es impresionante, la explosión de todo el pueblo volcándose en enseñar nuestras bodegas, nuestros viñedos, nuestro paisaje, nuestro arte de Miguel Ángel, en definitiva, todo lo que es Aldeanueva. En fiestas patronales, por ejemplo, tenemos degustaciones de vino en el Museo del Vino todas las tardes. También se hace "Amigos del vino" en el que se presentan los primeros vinos de Rioja, Aldeanueva no es que quiera decir somos los primeros, es que por cuestiones geográficas y de climatología es donde primero comienza la vendimia y con ello donde primero se hacen los mostos y con ello la vendimia... Poco a poco vamos haciendo nombre.
— ¿Cuándo empieza la corporación municipal a darse cuenta de que no solo es importante mantener las infraestructuras agrícolas en buen estado (caminos, etc.) sino dar un paso más allá y apostar por la promoción?
— Desde el primer momento. A principios de los noventa vimos esa necesidad. Entonces comenzamos a hacer cositas porque veíamos que se requería. En aquella época Aldeanueva tenía un volumen inmenso de viñedo, pero no etiquetaba, ni tenía marketing, ni hacía promoción de sus vinos, eran otros lugares los elaboraban con nuestras uvas. A partir de ahí se va cambiando poco a poco la situación y empezamos a hacer exposiciones, eventos, a recuperar calados que se habían dejado. No hay que olvidar que a principios del siglo XX aquí teníamos más de cien bodegas, pero fueron desapareciendo, especialmente en la década de los setenta cuando entró el espárrago y desbancó a la uva. A últimos de los ochenta comenzaron con las viñas y a partir de ahí, sin parar. Y nosotros como corporación, también sin parar: haciendo promoción, eventos, catas, enseñando viñas, preparando miradores... Todo lo que hacemos es pensar en el viñedo, en la promoción de nuestros vinos y de nuestras marcas.
— ¿Qué imagen cree que tiene la gente de Aldeanueva?
— Estamos creando la imagen. Siempre La Rioja Baja era el granero de la uva, de los mostos, los que vendíamos la uva a terceros para que fueran ellos los que hacían la marca. En cambio, ahora hemos intentado recuperar ese espacio y hacer nuestro propios vinos y marca. Además, es el futuro, el elaborar y etiquetar nosotros, porque si no estás siempre dependiendo de otros, pero ahora haciéndolo nosotros somos responsables de nuestra imagen, precios, etc.
— Parece entonces que la comercialización y la elaboración es la parte pendiente...
— Efectivamente, debemos crecer en comercialización. Ya hay más de veinte bodegas en el pueblo que tienen sus marcas, salen a vender, son competitivas, se promocionan.
— Habitualmente Rioja Alta y Rioja Alavesa suelen llevarse más méritos en el mundo del vino, ¿cómo se vive esta cuestión desde Aldeanueva donde se producen una parte importante de materia prima de la denominación?
— Eso tiene su razón de ser, durante mucho tiempo ellos eran los que elaboraban el vino y nosotros no, por ello, hasta que vayamos cogiendo imagen y ganando un lugar en el mercado se tardará años. Tendremos que ir innovando para tratar de cogerles, aunque nos llevan mucha ventaja, porque al final nosotros hemos empezado a elaborar hace veinte años.
— Se habla de capitales del vino, ¿qué etiqueta podría ponérsele a Aldeanueva?
— Bueno, si no somos capital seremos metrópoli (ríe). En realidad lo importante es que cuando se abra una botella de Aldeanueva el vino esté bueno, el consumidor mire lo que pone en la botella, y tenga ganas de repetir, no una sino muchas veces.